
               
              En  1991 apareció en California el libro: de Sreaming Wolf (pseudónimo):  A DECLARATION OF WAR: KILLING PEOPLE TO SAVE ANIMALS. Fue el primer  texto en defensa explícita de la violencia contra los humanos para  salvar a los no-humanos que catalogó la Biblioteca del Congreso de  los Estados Unidos. Por el momento aunque alguna vez se han  incendiado granjas –campos de concentración- de pollos y ha habido  actos de violencia ‘de baja intensidad’ (muy baja si se compara  con el dolor infringido a los no-humanos), en realidad las amenazas  son verbales: nunca ha muerto ningún asesino de animales por las  balas de los ‘liberadores’; pero en todo caso, la violencia de  los ‘liberadores’ merece un comentario crítico, aunque sólo sea  porque el libro de Sreaming Wolf se ha usado abundantemente contra  los defensores de los derechos de los no-humanos.
              Los  ‘liberadores’ de los animales no-humanos defienden exactamente lo  contrario que propugnan los asesinos de los animales no-humanos. Para  quienes aceptan matar animales en un laboratorio, esa muerte de un  no-humano es justa si ayuda, por ejemplo, a salvar vidas humanas. En  contrapartida, los ‘liberadores’ aceptarían matar científicos  para salvar vidas de animales de laboratorio. ‘Descuartizar a  quienes descuartizan’ o ‘viviseccionar a quienes viviseccionan’  sería actuar imparcialmente, dándoles algo de su propia medicina a  los opresores. Es la teoría revolucionaria desde siempre. Ojo por  ojo. Te hacemos lo que haces. 
              Posiblemente  la identidad de Screaming Wolf (un tema sobre el que se ha especulado  mucho) sea la del editor del libro, el activista Sydney Singer (que  no tiene ninguna relación con Peter Singer), fundador de una  organización religiosa peculiar que se autootorgó un doctorado y  que defiende también que los humanos deben dejar de reproducirse  porque ‘la reproducción humana es un mal que perpetúa otro mal’  (es decir, la opresión de la naturaleza). 
              El  error filosófico de Screaming Wolf es el determinismo. Creen que la  especie humana nunca cejará en su esfuerzo por matar a los  no-humanos. En su opinión, hay algo genético en el cazador, o en el  científico que mata a un chimpancé en un laboratorio para ensayar  una vacuna. Por eso es inútil discutir con asesinos. No se habla con  quien oprime, simplemente se le impide oprimir. 
              Screaming  Wolf tiene, además, una visión profundamente pesimista de los  humanos. Para esa teoría los humanos sólo se preocupan de su propio  bienestar, hay un egoísmo de especie que impide interesarse por las  necesidades de los no-humanos. Por lo demás, suponer que las cosas  no cambiarán jamás atenta a la experiencia y sólo sirve para dar  argumentos a quienes consideran negativamente al movimiento por la  extensión de derechos. Que las tesis de Screaming Wolf (ampliamente  rechazadas y rechazables) puedan usarse contra la lucha por un trato  ético a los animales, sólo muestra la falta de argumentos de los  adversarios de la ética animal. 
               
              